
El mendocino incumplió el aislamiento obligatorio en tres ocasiones. Además, la pena incluye un año de prisión en suspenso.
La jueza del Juzgado Penal Colegiado, Cristina Pietrasanta, condenó este miércoles a Edgardo Riby a la pena un año de prisión en suspenso y 200 horas de trabajo comunitario en el Hospital Notti, luego de un juicio abreviado acordado entre el fiscal Fernando Giunta y el defensor del imputado, y se convirtió en la primera persona condenada por violar la cuarentena en Mendoza. Riby violó tres veces el aislamiento obligatorio los días 2, 10 y 15 de abril, y terminó detenido en la Penitenciaría Provincial.
El imputado admitió su responsabilidad sobre las tres veces que violó el aislamiento social, preventivo y obligatorio, y manifestó estar de acuerdo con la pena. Ahora, Riby recuperará su libertad y quedará a disposición de las autoridades del Notti para que le ordenen las tareas a cumplir. «Lo importante es que vea la realidad que se está viviendo debido a la pandemia del coronavirus en ese lugar«, comentó una fuente ligada al caso.
Finalmente, desde la Justicia provincial informaron que en los próximos días saldrán más casos a la luz por distintos casos de incumplimiento del aislamiento obligatorio.
Las tres detenciones
Cerca de las 18.00 del pasado 2 de abril, el condenado fue detectado en el interior del Barrio San Martín tomando alcohol con otro sujeto. «Vamos a la casa de un amigo en el Barrio Olivares», les explicó a los policías. Ocho días después, los oficiales lo interceptaron en la Plaza Matons, ubicada en la Sexta Sección, y también aseguró que se dirigía a la casa de un amigo, casi sin entender que otra vez estaba violando el artículo 205 del Código Penal.
Por último, una semana después, estaba caminando por la esquina de Beltrán y San Martín cuando lo detuvo personal policial. En esa ocasión, el implicado brindó otra identidad y dijo que estaba yendo a visitar a un familiar. En esta última ocasión, fue trasladado al penal directamente.